Hace ya un año las militantes de la organización política La Cámpora Magdalena, lanzó un programa de gestión menstrual en las cárceles. Esta iniciativa surgida en Magdalena fue tomada desde la conducción provincial de la organización y comenzó a también a articularse con autoridades provinciales del área de Justicia y Derechos Humanos. En esta columna las responsables de la iniciativa relatan la experiencia desarrollada en la Unidad 51 del Servicio Penitenciario Bonaerense.
Por Frente de Mujeres e Igualdad de Géneros de La Cámpora
El día jueves 24 de junio, el Frente de mujeres e igualdad de géneros de La Cámpora inició en la Unidad Penitenciaria 51 de Magdalena los talleres de sensibilización en gestión menstrual Traspasando Muros.
Los temas que se desarrollaron en este primer acercamiento a la temática fueron sobre las experiencias personales relacionadas a la menstruación, los mitos y tabúes, la aproximación a los diferentes productos de higiene menstrual tanto desechables como reutilizables y la presentación del proyecto; ocupando un lugar preponderante la escucha atenta y respetuosa.
El proyecto tiene como axioma que “Menstruar es político”, y por ello se fundamenta sobre tres ejes: la perspectiva de Derechos Humanos, la perspectiva de géneros y la perspectiva ambiental.
Una perspectiva de Derechos Humanos porque está pensado para las compañeras en contexto de encierro entendiendo que la salud menstrual es un derecho, y también sostener a través de las redes feministas el desarrollo de un proyecto de vida tanto dentro como afuera de los muros.
Una perspectiva de género porque nos permite entender que el paradigma actual con respecto a la menstruación es un factor de desigualdad. Que actualmente es urgente visibilizar y apropiarnos de nuevas alternativas de gestión menstrual saludables para nuestros cuerpos, terminar con los tabúes al incentivar el acceso al conocimiento menstrual y desnaturalizar muchas cuestiones vinculadas a los cuerpos menstruantes.
Una perspectiva ambiental porque evidencia cómo la industria ejerce una práctica de control hacia los cuerpos que menstrúan y que el uso de productos de higiene menstrual desechables producen un impacto ambiental profundamente contaminante. Los productos reutilizables no sólo son amigables con el ambiente y menos tóxicos para nuestros cuerpos, sino que también el factor económico permite la equidad menstrual para todas y todes.
A partir de una propuesta del Frente de Mujeres e igualdad de géneros de La Cámpora y acompañadas por la concejala quilmeña Eva Mieri, responsable provincial del mismo ya ha comenzado a desarrollarse el primero de una serie de estos talleres en varias Unidades Penitenciarias de la provincia de Buenos Aires, de forma articulada con la Subsecretaría de Política Criminal del Ministerio de Justicia y DDHH BA y el Patronato de Liberados. En esta ocasión, fuimos acompañadas por autoridades Provinciales como la coordinadora Provincial de Educación en Contextos de Encierro Prof. Tatiana Slater, equipos directivos y unidades educativas del servicio penitenciario y la Jefatura distrital de magdalena.
Esperamos que este proyecto sea el preámbulo de nuevas oportunidades para ampliar derechos, y que tejiendo redes, generando lazos e impulsando políticas públicas que reparen injusticias históricas, sigamos construyendo entre todas otros modos de ser y de habitar el mundo, sin culpas, sin vergüenza, mas consientes, más libres, con derechos y más oportunidades.
Porque para todas, todo.