En su primera escala de la gira europea, que tendrá a España como segunda etapa, el presidente recibió hoy un fuerte respaldo de Portugal para negociar con el FMI un acuerdo flexible y para la suspensión de sobrecargos en las tasas de interés que instrumenta el organismo, en el marco de medidas para países en desarrollo destinadas a ayudar a superar la pandemia.
Durante la conferencia conjunta que ofrecieron esta mañana los mandatarios de ambos países luego del encuentro bilateral en Portugal, el primer ministro Antonio Costa apoyó el planteo argentino y comparó la situación similar que enfrenta hoy la Argentina con la que enfrentó su país y el tratamiento que le dio el FMI.
«Yo me he enfrentado con el mismo problema que tiene la Argentina. Teníamos un préstamo que era superior a la cuota de Portugal en el Fondo. Pagábamos un sobrecargo muy significativo y felizmente hemos logrado convencer al FMI de liberarnos de ese sobrecargo. Hoy estamos en una situación muy particular y creemos que es un momento para suspender ese sobrecargo para poder ayudar a los países que están combatiendo el COVID-19», subrayó Costa.
El presidente portugués compartió, de esta forma, la visión de que el FMI debe flexibilziar sus políticas para países de ingresos medios, y no circunscribir las medidas de emergencia solamente a países de ingresos más bajos.
Costa ya había anticipado esta posición durante la última Cumbre Iberoamericana de presidentes, donde exigió explícitamente que el organismo multilateral reduzca los sobrecargos aplicados a los países altamente endeudados.
En la rueda de prensa que compartió con Costa, Fernández explicó la posición del Gobierno argentino: «queremos alcanzar un acuerdo con el Fondo, pero pedimos que no nos condicione el futuro, que no condicione el desarrollo de un país que necesita terminar con la desigualdad».
«Nosotros buscamos un acuerdo se pueda sostener en el tiempo y que no postergue más a los argentinos; los argentinos ya han sido postergados por el enorme crédito que le ha dado el FMI», durante el gobierno de Mauricio Macri, continuó.
«Le pido al Fondo comprensión sobre la naturaleza de ese acuerdo que fue nocivo para la Argentina y comprensión por el tiempo que vive el mundo por la pandemia. Ojalá podamos llegar a ese acuerdo rápido», resumió Fernández.
El dato a tener en cuenta es que los próximos vencimientos de capital que tiene la Argentina con el FMI vencen en septiembre y diciembre del corriente año.
Si bien para esa fecha la Argentina podría recibir unos 4.354 millones de dólares en Derechos Especiales de Giro, la moneda del FMI, ya que muy probablemente estaría aprobada o a punto de lanzarse la iniciativa de Kristalina Georgieva para aumentar las reservas a todos los países, existe la posibilidad de que el Gobierno utilice esa partida para otro propósito específico, para ayudar a salir de la crisis.
Es por ello que negociar un acuerdo de Facilidades Extendidas con el Fondo vuelve a ponerse en la lista de prioridades. Y en ese marco la posibilidad de que el entendimiento no se extienda en el tiempo.
Al respecto de los ingresos en reservas por la mayor emisión de moneda del FMI, la semana pasada el bloque kirchnerista del Senado logró un dictámen favorable a un proyecto de declaración, presentado por el legislador Oscar Parrilli, para que los DEG que reciba la Argentina sean aplicados al pago de gastos corrientes de la pandemia.
Mañana el presidente Fernández será recibido por Rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela, y luego, en otro encuentro, se reunirá con el primer ministro Pedro Sánchez, en el Palacio de la Moncloa, donde también tratarán estos puntos específicos de la negociación con el FMI, entre otros asuntos.
La tercera escala de la gira europea será Francia. Allí, el miércoles el Presidente almorzará con Emmanuel Macron, un encuentro en el que podrían fijar posición sobre el Club de París, el FMI y la agenda de Cambio Climático, entre las prioridades para ambos jefes de Estado.
La importancia de lo que pase con el Club de París radica en que Argentina tiene un vencimiento por 2.400 millones de dólares que entró en fase de descuento y el Gobierno busca posponer ese pago de manera consensuada para no caer en situación de default.
Fuente: Télam