Representantes de los sectores público y privado afirmaron que la reciente habilitación para la construcción del Canal Magdalena es el comienzo de un proceso que permitirá aumentar el comercio fluvial y marítimo, con una mayor actividad portuaria y el desarrollo de nuevas terminales en la provincia de Buenos Aires, que a su vez generarán empleo. El martes pasado se procedió a fondear una boya en el kilómetro 200,800 del Río de la Plata, en el inicio del Canal Magdalena.
«El Canal Magdalena es estratégico. Permitirá, entre otras ventajas, acercar los puertos fluviales con los marítimos y achicar sensiblemente los tiempos de navegación entre los distintos puertos del país», explicó el titular de la Unidad Ejecutora Canal Magdalena e interventor de la Administración General de Puertos (AGP), José Beni.
El funcionario anticipó que «en las próximas semanas, vamos a hacer el llamado a audiencia pública, la cual se va a realizar en mayo».
«Confiamos en que en unos meses podamos realizar el llamado a licitación para la obra», indicó Beni, quien resaltó que «la construcción del canal es fundamental para fomentar la integración de los puertos argentinos».
Subrayó además que «permitirá fortalecer la navegación de cabotaje en nuestras aguas y generar nuevas fuentes de trabajo en la costa fluvial de la provincia de Buenos Aires».
«Desde la Unidad Ejecutoria a cargo de este proyecto hemos asumido el compromiso de avanzar en el llamado a licitación de manera ágil y rápida, priorizando y velando por la transparencia y legalidad a lo largo de todo el proceso», puntualizó el funcionario.
El martes pasado, gracias al trabajo coordinado entre el Ministerio de Transporte, la Cancillería y el Servicio de Hidrografía Naval, se procedió a fondear una boya en el kilómetro 200,800 del Río de la Plata, en el inicio del Canal Magdalena, lo que estableció una señal de aguas seguras o de recalada, para su navegación a través de calados compatibles con sus profundidades naturales.
Por otra parte, la delegación argentina ante la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP) notificó su emplazamiento a Uruguay, conforme lo acordado oportunamente.
El secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Julio González Insfrán, remarcó que «lo importante es que el Canal Magdalena tiene el presupuesto asignado, la plata está».
«El proyecto del canal tiene el respaldo económico para ejecutarlo, ahora queda la ejecución», sostuvo González Insfrán, respecto a los $ 25.800 millones que se confirieron a la Unidad Ejecutora.
El gremialista subrayó que «hace muchos años que se viene hablando del canal Magdalena», que «es mucho más corto para ingresar a la Hidrovía que por Montevideo».
Agregó que «es la salida natura del Río de la Plata», con lo cual, afirmó, «es más fácil el mantenimiento del dragado».
En cambio, señaló, «el otro canal corta un banco para ir a parar a Montevideo», mientras «es más costoso su mantenimiento porque corta la corriente».
«El canal Magdalena corre en el mismo sentido que la corriente del río», subrayó González Insfrán, quien destacó que «pueden unirse el cabotaje marítimo y fluvial».
A su criterio, el desarrollo de este proyecto «le va a dar vida a la región bonaerense para que se asienten puertos en la zona, es un avance muy importante porque habrá un mejor acceso y una salida más rápida para la carga que venga del sur del país».
De todos modos, el dirigente remarcó que «sin flota mercante nacional no es beneficio para el país», y aseguró que «el negocio cierra si, además de hacer el canal Magdalena y licitar la Hidrovía Paraguay Paraná, empezamos a pensar en cómo tener flotar propia».
«La soberanía hay que ocuparla y ejercerla. Si no tenemos buques propios o que operen con bandera argentina no va a haber grandes cambios por más canales que desarrollen», sostuvo González Insfrán.
Para el ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, «el Canal de Navegación Magdalena permitirá hacer más ágil y fluida la circulación de barcos en el Río de la Plata, y reducirá el recorrido y los costos logísticos para el comercio exterior de nuestro país».
«Es un paso más hacia el fortalecimiento de nuestra soberanía nacional y el puntapié para desarrollar, diversificar y dotar de competitividad a la producción y las economías regionales del norte y el litoral argentinos», sostuvo el titular de la cartera de Interior.
En la misma línea, el presidente del consorcio de gestión del puerto La Plata, Pedro Wasiejko, consideró que «la construcción del canal Magdalena tendrá un impacto positivo para el país», porque «implicará soberanía nacional, integración con el mundo, mejoras competitivas y fortalecerá la economía regional y de la Argentina».
Agregó que el proyecto «abre una mirada de la Argentina conectada con la ruta del sur hacia el Oriente, con el desarrollo futuro de África, la conectividad con India, China y el sudeste asiático».
«Tenemos que pensar que el país debe dejar de ser el extremo del sistema de transporte global para convertirse en un centro de concentración de cargas para Latinoamérica», subrayó el funcionario.
Fuente: Télam