La semana pasada un caso sospechoso de coronavirus puso en vilo a Punta Indio. Enseguida circularon rumores y se difundió el nombre de la persona, se trataba de una profesional de la salud. Finalmente el resultado fue negativo. La médica publicó una carta y pidió que se difunda, allí da una verdadera lección de ciudadanía y ética profesional.
La semana pasada un caso sospechoso de Covid-19 mantuvo en vilo a la población de las localidades bonaerenses de Verónica y Punta Indio. La información diaria emitida desde la Municipalidad de Punta Indio, mediante placas (ver imagen más abajo) con cifra de infectados, casos sospechosos y cantidad de personas en cuarentena, agregaba que se trataba de personal de salud. Enseguida distintas versiones tomaron las redes sociales, circularon rumores y se difundió el nombre de la persona que podría estar infectada, incluso dándolo por confirmado. Se violó su privacidad y se generó más miedo entre la gente. Finalmente llegó el resultado del hisopado, que fue negativo.
María José Guerra, una médica anestesióloga, que trabaja en el Hospital «Dr. Guillermo Hernández» de Punta Indio y en otro nosocomio de Berazategui, padecía los síntomas y se sometió al más estricto protocolo de prevención y aislamiento, hasta tener la confirmación de no estar infectada. Cuando pasó todo, publicó una carta y pidió a todas y todos que la difundan, allí contó detalladamente los hechos y respondió a los vecinos que por ignorancia o mala fe hicieron circular información falsa. Una lección de cordura y ética profesional en tiempos donde la ignorancia, la psicosis social y el chisme hacen más daño que cualquier virus.
La carta completa:
Mi nombre es María José Guerra, soy la anestesióloga de los miércoles.
– En primera instancia me gustaría recordarles que no tengo que dar explicaciones sobre mi vida personal, porque la historia clínica de las personas es privada y confidencial. Así que pido por favor que como yo respeto la intimidad de las personas, pido el mismo respeto para mi persona. De todas formas, ya que muchas personas me nombraron, acá estoy y voy a aprovechar mi momento de fama para hablar de las cosas que sí son importantes:
1. Lo importante es que hace mucho tiempo venimos trabajando muchísimo en el partido de Punta Indio, muchas horas al día, fuera de nuestro horario laboral, para aprender y llevar a la práctica protocolos de Covid-19 propuestos por la Provincia de Buenos Aires con aval científico. Pero hasta ahora no sabíamos cómo iba a funcionar cuando tengamos el primer caso sospechoso. Ahora sí lo sabemos. El protocolo funciona con éxito.
Mientras realizábamos el procedimiento, detalladamente iba observando qué cosas podíamos mejorar para que la calidad de atención sea perfecta. Mientras todos hablaban de mí, yo y todo el equipo de salud trabajábamos en eso, en seguir mejorando.
Hubo un caso sospechoso, que fui yo.
El domingo a la noche como todos saben empecé con dolor de garganta.
Al día siguiente, como ya me costaba tragar, decidí no subestimar los síntomas ya que estamos en esta pandemia. Agarré las guías (que para eso están) y volví a releer lo que hoy es definición de caso sospechoso para Covid-19: «El trabajador de salud con fiebre (mayor o igual a 37.5) o 2 síntomas (tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria, anosmia, disgeusia) son sospechosos de Covid-19. Nota: si el trabajador de salud no presenta fiebre debe aislarse 72 horas y luego hisopar».
Hasta ese entonces no entraba dentro de la definición de caso sospechoso sin embargo no fui a trabajar al Hospital de Berazategui. Llame al 107 (SAME) como cualquier ciudadana.
Cuando llegué al hospital (en Punta Indio) activaron el protocolo Covid-19. No ingresé al hospital, me atendieron en un consultorio que esta afuera, destinado para evaluar a pacientes sospechosos, el médico usó el equipo de protección personal como corresponde (acá en Verónica sí cuidan a los médicos), me revisó, y coincidimos, según protocolo, que como no entraba en la definición pero tenía un antecedente epidemiológico importante (trabajadores de salud en Berazategui, donde ya hay casos y ya circula el virus) íbamos a esperar 72 horas y luego hisopar.
El médico me dio pautas de alarma y como tengo criterios de aislamiento domiciliario según protocolo, fui a mi casa a aislarme. A la tarde registré 37.6 de temperatura como única vez. Lo comuniqué por teléfono y, según protocolo, fue suficiente para ahora sí entrar dentro de la definición y entonces hisoparme.
Como era de noche, e hisopar tiene un riesgo de exposición para el personal de salud, decidimos realizarlo en la mañana.
A las 6 a.m. me realizaron el hisopado con el equipo de protección personal nivel 3 (máximo) y la muestra salió en ese momento para el Hospital Rossi de La Plata.
Se hicieron las notificaciones correspondientes y me fui a mi casa a continuar con el aislamiento domiciliario. Estuve en una habitación sola, con un baño personal, no comparto nada, si salgo de la habitación lo hago con barbijo. Mi familia también estuvo en aislamiento. Así es como se tiene que trabajar ¡y así se trabaja en Verónica!
2. Yo ademas de ser una médica responsable, soy una ciudadana responsable, y cumplo estrictamente con la cuarentena, no salgo al súper, hago delivery, no salgo a la farmacia ni a la verdulería, ni veo a familiares ni a amigas. Sólo me subo al auto los lunes para ir a Berazategui y los miércoles para ir al hospital de Verónica.
Así que 48 horas antes de comenzados los síntomas (que es el período asintomático en donde uno contagia), o sea viernes y sábado, estuve en mi casa, por lo tanto si era positiva para Covid-19 no hay chances de haber contagiado a la población y entonces la cadena de infección se hubiese cortado conmigo. Para esto sirve la cuarentena. Sigan quedándose en sus casas por favor.
3. La placa que subieron las autoridades avisando del caso sospechoso y aclarando que se trataba de un personal de salud fue de común acuerdo, todos coincidimos que ir con la verdad es importantísimo para generar confianza.
Dejen de desconfiar, estamos haciendo un esfuerzo enorme, somos los primeros que queremos detener al virus. Era más fácil ocultar, era menos exposición para mí, pero elegimos siempre la verdad. Intentaron cuidar mi intimidad, porque no cambiaba en nada la situación, y mi salud es privada, pero lamentablemente la gente eligió engancharse con el puterío y no con lo importante.
Eligieron hablar, nombrarme, dar por confirmadas cosas que no eran ciertas y se opacó lo importante. Agradezco a todos los que, sin importar si era verdad o no, sólo se preocuparon por mi bienestar.
Por último, mi resultado es negativo.
Asi que Tuti*, no tengo Covid-19. Quedate tranquilo. Y la próxima vez tené cuidado lo que decís, porque una palabra puede lastimar a muchas personas que están con ansiedad y pánico frente a esta pandemia, no es mi caso porque tengo la cabeza en seguir estudiando para mejorar.
Este mensaje sí viralicenlo. Esta es la verdad y esto si tiene que llegar a todos para transmitir tranquilidad.
– El protocolo se activó correctamente.
– La cuarentena sirve. ¡Imagínense si hubiese dado positivo y el sábado hubiese ido al súper! ¡Quédense en casa!
Por último de verdad, el virus se transmite por gotas que salen de nuestras bocas o que caen en una superficie, luego las tocamos con nuestras manos y las llevamos a la boca o los ojos.
Entonces:
– Distanciémonos a más de 2 metros así esas gotas no nos llegan
– Lavémonos las manos con jabón o alcohol por si tocamos accidentalmente al virus.
El barbijo casero solo disminuye el riesgo pero no asegura nada si no tomamos las otras dos medidas.
Gracias por su atención.
Los seguimos cuidando.
LA ANESTESIÓLOGA DE LOS MIÉRCOLES
(no anestesista, no nos gusta q nos llamen así).
Nota: *Tuti: se refiere a un vecino que publicó información errónea en redes sociales.