El director de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard, consideró hoy que las consecuencias del coronavirus “abren la posibilidad de discutir las estructuras tributarias” y calificó como “interesante” la propuesta de aplicar un impuesto a las grandes riquezas.
“La pandemia de Covid-19 genera una crisis inédita que requiere soluciones novedosas y esa situación pone de relieve la posibilidad de tener una discusión profunda sobre las estructuras tributarias”, explicó.
El Frente de Todos prepara un proyecto para presentar ante la Cámara de Diputados que, según fuentes parlamentarias, impulsa la creación de un impuesto extraordinario que solo lo pagarán las personas con un patrimonio superior a los tres millones de dólares, con lo cual no afectará a las clase media ni al sector productivo.
En declaraciones radiales, Girard consideró como “una medida muy interesante” que se aplique un impuesto a la riqueza y sostuvo que “la crisis sanitaria está poniendo de relieve la posibilidad de tener una discusión profunda sobre las estructuras tributarias, la presencia del Estado en la economía y cómo financiar esa inversión del Estado”.
“Lo que mostró el avance del neoliberalismo desde la década del 70 hasta estos días es que se ha reformado profundamente la estructura tributaria a nivel global, no solo en Argentina, dándole más participación a los impuestos al consumo y reduciendo el peso de los impuestos patrimoniales, sobre todo en el caso de las grandes fortunas”, graficó.
Girard detalló que además se “generó una competencia entre países para bajar impuestos a las multinacionales, supuestamente para atraer inversiones, que en lo único que ha redundado es en una mayor desigualdad y en economías que van languideciendo y solo pueden sostener niveles de vida y de consumo con endeudamiento creciente”.
“A diferencia de reformas anteriores, que se hicieron muchas veces por la fuerza o en el contexto de crisis financieras donde se impone la brutalidad de la lógica del mercado, hoy tenemos la posibilidad de llevar adelante una deliberación democrática profunda de cómo revertir esa estructura tributaria, cómo reformarla y cómo construir sociedades más justas y más igualitarias”, concluyó.