«A Carlos Bilardo le dijeron que se cortó el cable», así tituló ayer una nota el portal de noticias de Radio Provincia, en la que se relata que el extécnico del seleccionado campeón del Mundo en 1986, quien padece una enfermedad neurodegenerativa, tiene vedado desde anteayer el acceso a los medios periodísticos televisivos para evitarle el impacto negativo de la noticia del fallecimiento de Diego Armando Maradona.
Como si se tratara de una nueva versión, futbolera, de la película alemana Good Bye, Lenin!, de 2003, en la que a una mujer mayor, de fuerte compromiso comunista, y que sale de un estado de coma prolongado, sus hijos le ocultan la noticia de la caída del Muro de Berlín y de la URSS y hacen peripecias para impedirle el acceso a las noticias, a Carlos Salvador Bilardo también le están evitando el disgusto y fuerte impacto que podría causarle la muerte del 10.
A Carlos Bilardo le dijeron “que se cortó el cable” para que no sepa de la muerte de Diego Maradona, dijo Jorge, su hermano, a Radio Provincia.
“Ya le apagaron la televisión, le dijeron que se cortó el cable, hasta la noche o mañana, no sé qué se le dirá. Él está en un departamento a la vuelta de la casa con un enfermero”, indicó Jorge.
Recordó que Diego “vivía a cuatro cuadras, con Claudia y el padre nos encontrábamos en el café. Me acuerdo cuando en el 83 fuimos a Barcelona y Carlos habló con él y le dijo: “Mirá que vas a ser el capitán”. Diego lloraba y Carlos se fue, lo dejó llorando en la vereda”.
Jorge Bilardo también recordó que “cuando teníamos la escuela de Carlos en Laferrere, un día me llaman y me dicen que un pibe necesitaba 15 mil dólares para operarse. Me preguntaron si Diego podría ir a jugar para recaudar. Lo llamé y me dijo: “Sí ¿puedo llevar alguno? A las 8 estaba ahí. Recaudaron mucho y faltaban 5 mil dólares y dijo: “Los pongo yo”.