El debate sobre el desdoblamiento de las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires ha cobrado fuerza en las últimas semanas, con un creciente apoyo tanto de intendentes peronistas como radicales. La propuesta busca separar las elecciones provinciales de las nacionales, una medida que, según los impulsores, podría “garantizar elecciones democráticas, libres y masivas” y dar mayor atención a los problemas locales.
A raíz de un simulacro electoral que reveló las dificultades del sistema de elecciones concurrentes, dirigentes de distintas fuerzas políticas están intensificando las discusiones. Entre ellos se encuentran Esteban Reino, intendente de la UCR en General Alvarado, y Gustavo Barrera, del PJ en Villa Gesell, quienes han manifestado públicamente su apoyo al desdoblamiento. Para ellos, separar las elecciones permitiría enfocar mejor los esfuerzos en los temas locales, evitando que se diluyan en la competencia nacional.
El desdoblamiento también cuenta con el respaldo de sectores libertarios, aunque estos señalan la falta de preparación en la provincia para llevar a cabo una reforma electoral de tal magnitud. A pesar de las críticas sobre la logística y el costo adicional de los comicios, la propuesta sigue ganando terreno, especialmente en un contexto donde la inminente suspensión de las PASO genera incertidumbre.
El debate sigue abierto, y las voces tanto a favor como en contra del desdoblamiento se multiplican en todo el territorio bonaerense, reflejando un clima de tensión electoral que podría redefinir las próximas contiendas.