El pasado domingo 4 de febrero, un desprendimiento y derrumbe de mampostería en la torre del reloj y campanario de la iglesia principal de Magdalena, que cayó en plena calle Goenaga frente a la plaza principal y los juegos infantiles afortunadamente sin daños mayores ni víctimas que lamentar, preocupó a vecinos y autoridades. La calle permaneció cortada hasta este miércoles, cuando en horas de la mañana, se realizó la primera etapa de reacondicionamiento. «En esta oportunidad se desarrollaron trabajos de limpieza y evaluación de la estructura dañada», informaron desde el municipio.
Para estas tareas, «se trabajó en conjunto con la Subsecretaría de Participación Ciudadana (Pablo Fernández), Dirección Provincial de Defensa Civil (Fabián García), con la Dirección de Bomberos y la Dirección de Riesgos Especiales base Centro», señalaron desde el área de Prensa municipal.
«Los efectivos presentes fueron: Teniente Millan Juan (dirección de bomberos), Oficial ayudante Vega Kevin (direccion de riesgos especiales base centro) y Oficial de policía Bernachea Matías (direccion de riesgos especiales base centro)», detallaron.
«Se realizó la quita de la mampostería que presentaba riesgo de caída y se resguardó el material en el Museo local», agregó el comunicado.
El desprendimiento fue producido por malezas que enraizaron en la torre y en su crecimiento resquebrajaron la mampostería hasta hacerla caer.
