ENTREVISTA EXCLUSIVA CON CAMILO DÍAZ // El 22 de agosto se cumplen 100 años del nacimiento del prolífico intelectual, artista y emprendedor industrial gallego Isaac Díaz Pardo. En la ciudad bonaerense de Magdalena fundó a fines de la década del 50 un establecimiento industrial de inspiración vanguardista, la fábrica Celtia – Porcelanas de Magdalena, que fuera productor de vajilla de calidad de venta masiva en la Argentina de los años sesenta y setenta, además de centro de reunión de artistas y meca de la intelectualidad española en el exilio. InformadorMgd entrevistó a su hijo Camilo, quien pasó su juventud entre Magdalena y La Plata y hoy vive en Santiago de Compostela. Un relato que abre puertas sorprendentes y aporta datos para seguir investigando un capítulo importantísimo y casi desconocido de la historia magdalenense, ligado a las utopías progresistas del siglo XX y la búsqueda de unión entre arte, industria y vida cotidiana.
– ¿Quién fue Isaac Díaz Pardo y cuál es su importancia para la cultura gallega?
Isaac Díaz Pardo, mi padre, aparte de todas las vocaciones y actividades que desarrolló con gran éxito (artista plástico, arquitecto, diseñador, empresario, ingeniero industrial cerámico, editor, escritor, pensador) es posiblemente la persona que más luchó en Galicia para recuperar nuestra memoria histórica silenciada por la dictadura de Franco, y lo consiguió.
Hizo que las empresas que creó alrededor de Sargadelos se llamaran las “industrias de la memoria” desde donde desarrolló su actividad cultural orientada a recuperar nuestras identidades en todos los ámbitos.
De ahí sale la recuperación de la tradición cerámica con Sargadelos, el nuevo Seminário de Estudos Galegos recuperando la institución que desmanteló en 1936 el franquismo, la recuperación del Laboratorio de Xeoloxia de Laxe del geólogo Parga Pondal, el Seminário de Sargadelos (centro de diseño, arte/industria, departamento de investigación cerámica, Experiencias de Tecnología y Escuela Libre de Sargadelos -35 Experiencias entre 1972 y 2006- por donde pasaron más de 2500 alumnos y profesores invitados que dictaban seminarios, mesas redondas, conferencias, etc. Como el Nobel Camilo José Cela, José Luis Sampedro, Torrente Ballestero, Antonio Gala, y muchos otros, que harían interminable este relato, pasaron por allí. Fue el Seminario el más importante centro de arte industria creado en Galicia, sino de España, inspirado al estilo de la Bauhaus o el instituto de Ulm alemanes y los Vkhutemas rusos.
Por eso la importancia de Isaac para la cultura e identidades gallegas fue ejemplar en la segunda mitad del S. XX y comienzos del XXI, adelantándose a la entrada de la democracia pues inició sus actividades a mediados de los 60 luego de su regreso de Argentina. Toda su obra en Sargadelos está declarada BIC (Bien de Interés Cultural), por la Xunta de Galicia a solicitud del Parlamento gallego por unanimidad de todos los grupos políticos.
– ¿Cómo surge el vínculo de Isaac con Argentina?
Surge por la necesidad de conectar con el exilio gallego culto que se encontraba en Argentina (que Isaac había conocido antes de que estallara la guerra civil, ya que pasaban por el taller de su padre, donde se realizaron los carteles de propaganda para el referéndum del 28 de junio de 1936, del Estatuto de Autonomía de Galicia, el artista, escenógrafo, diseñador, Camilo Díaz Baliño, asesinado el 14 de Agosto de 1936 por sus ideas galleguistas), y convencerlos que debían regresar: Luis Seoane, Blanco Amor, Rafael Dieste, Arturo Cuadrado, Antonio Baltar, Laxeiro, Valenzuela, Marivi Villaverde, Alberto Vilanova, entre otros.
Para eso Isaac se desplaza a Buenos Aires a finales de 1955 invitado por el Centro Gallego a exponer su obra plástica y las porcelanas que realizaba con gran éxito en O Castro Sada A Coruña, donde a partir de un taller de porcelana creó las Cerámicas del Castro en 1949.
Durante su estancia de tres meses en Buenos Aires en 1955 surgió la idea de crear otra fábrica allí, pues Luis Seoane había publicado meses antes en la Revista “Galicia Emigrante” un reportaje sobre las Cerámicas del Castro que despertó la idea.
Fue José Nuñez Búa, un exiliado en La Plata quien llevó adelante la idea y así nace la empresa Celtia S.A. Ese año con el aval de Isaac, quien participó en el capital con el dinero recaudado con la venta de sus cuadros y porcelanas en el país austral, un 20%.
– ¿De qué se trató el Laboratorio de Formas?
Ya está Isaac en Argentina a finales de 1956 para poner en marcha el proyecto industrial de Celtia, con la futura planta de producción construida y diseñada por el ingeniero Pedro Petriz y accionista de Celtia, que además fue Ministro de Obras Publicas de la Provincia de Buenos Aires durante el gobierno de Oscar Alende.
Isaac traba una relación muy fuerte con Luis Seoane, cabeza visible del grupo de exiliados gallegos donde surge la idea de recuperar las instituciones de prestigio del pasado gallego, poniendo en marcha la recuperación de nuestra memoria histórica. Entonces crea con Seoane, con esta idea, el Laboratorio de Formas de Galicia S.L. en 1963, que Isaac registra en España.
El primer emprendimiento fue restaurar la tradición cerámica en Sargadelos en 1970 que iba a financiar todo el proceso de recuperación de la memoria. Así el Laboratorio de Formas consigue en 1972 que se declaren las viejas ruinas industriales de Sargadelos, cerradas en 1875, Conjunto Histórico Artistico, luego vendrá la restauración del Seminario de Estudos Galegos, el Laboratorio de Xeoloxia de Laxe, donde se estudió el primer mapa de geología de Galicia por Parga Pondal, geólogo y catedrático de geología de la Universidad De Santiago, represaliado por el franquismo en 1936.
Luego vendrá el Instituto Gallego de Información para restaurar el diario “GALICIA” editado por Valentin Paz Andrade antes de la guerra civil para defender nuestros intereses, restaurar la tradición de la editorial NOS creada por Anxel Casal con La Ediciones do Castro, que llegó a publicar 1500 títulos, destacando los 210 volúmenes de la colección “Documentos para la historia contemporánea de Galicia”.
En 1970 el Laboratorio de Formas pone en marcha el Museo de Arte Contemporáneo gallego «Carlos Maside», del movimiento renovador del arte gallego a partir de Castelao. También pondrá en marcha una imprenta, Gráficas do Castro, las Galerías Sargadelos para divulgar nuestra cultura y quizás la institución más importante como centro de diseño e investigación cerámica, el Seminario de Sargadelos, un auténtico instituto de arte/industria.
– ¿Qué fueron la fábrica Celtia y Porcelanas de Magdalena?
Como ya dijimos Celtia SA, Porcelanas de Magdalena, fueron creadas por Isaac durante su estancia en Buenos Aires en 1955. Quedó encargado de configurar jurídicamente el proyecto José Nuñez Búa, juntó a más de 300 accionistas entre gallegos exiliados, emigrantes y argentinos amigos, entre los que se encontraba Pedro Petriz, diputado en el Parlamento de la provincia de Buenos Aires, ciudad de La Plata, donde expuso el proyecto de esta factoría, ofreciéndose el intendente de Magdalena, Dr. Rolindo Casamiquela, a llevar esa industria allí, liberándola de impuestos municipales durante 10 años y donando la parcela de una hectárea en el camino al balneario, Avenida España. Así fue como Celtia fue a Magdalena.
En 1958 Celtia ya vendía, entre otras, sus porcelanas en Buenos Aires en tiendas de gran prestigio como Harrod’s, Gaty-Chaves o La Piedad y fue su primer Presidente José Villamarin Prieto, presidente también del Centro Gallego.
Isaac buscó desde el primer momento, relacionar Celtia con la cultura Argentina para darle prestigio a los productos manufacturados, así en 1960, se organizó una experiencia que llevó adelante el artista y escritor Geno Díaz, jefe de decoración de Celtia, con niños y niñas decorando porcelanas, que alcanzó gran prestigio y el gobierno de la Provincia financió una exposición en Buenos Aires.
Por Magdalena pasaron pintores de prestigio argentinos y gallegos a decorar objetos como Torrallardona, Laxeiro, el propio Seoane que diseñó un hermoso gaucho a caballo y el mural que había en el hall de entrada de la sala de exposición de Celtia.
Isaac hizo todos los diseños de los servicios de mesa y ayudado por su mujer Carmen Arias “Mimina” quien estuvo más de tres años en los inicios para sacar adelante Celtia formando al personal de decoración hasta que llegó Geno Díaz y más tarde José Luis Montero. Isaac sólo hizo una pieza decorativa, en homenaje a Magdalena, una María Magdalena.
Isaac dirigió Celtia durante 12 años donde alternaba con la dirección de Cerámicas del Castro en Galicia, por lo que realizó más de 20 viajes entre Magdalena y Galicia para atender ambas empresas y en 1968 deja definitivamente Celtia para poner en marcha en Galicia las nuevas Cerámicas de Sargadelos, obra del Laboratorio de Formas, con Seoane.
– ¿Es verdad que Magdalena significó en un momento un espacio de reunión para intelectuales y artistas, no sólo gallegos sino también Argentinos, a partir de la existencia de Celtia?
Como ya dijimos Isaac ligó Celtia al mundo cultural e intelectual y por sus instalaciones pasaron artistas argentinos y gallegos, también intelectuales gallegos como Otero Pedrayo. Tengo entendido que pasaron entre otros Raúl Soldi, Torrallardona, Matilde Grant, Norberto Frontini, el fotógrafo Horacio Coppola, el pintor Lipa Burd que tiene una fundación en La Boca.
Celtia fue la meca para muchos gallegos que ansiaban saber que pasaba por Galicia cuando Isaac regresaba. Entre accionistas importantes también estaban Mondelo dueño de Suixtil, Solero y Morchon dueños de las tiendas Solmor de La Plata y Veamonte dueño de los Frigorificos Rioplatenses, quien viajaba en avioneta a las reuniones de socios y aterrizaba en la base naval de Punta Indio a donde lo íbamos a buscar.
Además también estaban como accionistas los profesores de la UNLP, Dr. Barba catedrático de historia y el Dr. Bussi de odontología entre otros. Todos ellos venían con frecuencia a Celtia invitados por Isaac. Y muchos amigos de Seoane como el ingeniero Goldestein o los Scheinberg, Lipchitz, etc.
Una visita importante a Celtia fue la del gobernador de la Provincia, Oscar Alende, luego de aprobar un proyecto de construcción de un centro de investigación cerámica con la colaboración de Celtia y la UNLP, a través del profesor Enrique Pereira director de tecnología y decano. Pereira, luego de la marcha de Isaac fue presidente de Celtia una etapa donde colaboré con él. La destitución del presidente Fondizi cambió el gobierno y el nuevo gobernador cambió el proyecto de un centro de investigación cerámica por una escuela de técnicos industriales en Magdalena.
– En Magdalena las generaciones más jóvenes no conocen prácticamente nada sobre la existencia de esa experiencia cultural e industrial tan importante, la figura de Isaac tampoco es muy recordada ¿crees que es importante rescatar esa memoria como patrimonio cultural local?
Si, creo realmente que es un capítulo importante en la historia industrial y cultural de Magdalena está etapa de la segunda mitad del S. XX, pues allí trabajaron durante 25 años muchas gentes de Magdalena que recordarán esa experiencia y a Isaac y todas las gentes que por allí pasaron.
– ¿Cuánto tiempo viviste en Magdalena?
En total he estado 12 años de mi vida trabajando entre Magdalena y La Plata donde me hice químico y me especialicé justamente con Pereira en tecnología cerámica. Luego de recibirme en 1974 trabajé en la construcción de un horno diseñado por mi padre y otras cosas más de mejoras técnicas hasta 1977 en que mi mujer, médico, y yo regresamos para incorporarme yo al proyecto de Sargadelos.
Además en esa época era muy insegura la Argentina por el golpe militar y de hecho desaparecieron amigos de Magdalena y otros compañeros de La universidad. Yo vivía en ese momento en La Plata y recuerdo que cuando salía muy temprano a trabajar a Celtia en mi auto, a la salida de La Plata me paraba gendarmería, me hacían salir del auto, me cacheaban y revisaban mi auto, así durante bastante tiempo, al final me conocían y me dejaban pasar. Qué épocas ¿no?
– ¿Cuál es actualmente tu vínculo con esta ciudad y con Argentina?
Me casé en Argentina y por esta razón viajo todos los años allí a La Dulce, Necochea, donde tenemos mucha familia y de vez en cuando a Magdalena al principio, antes de que Celtia cerrase, a visitar y asesorar a la familia Montes que compró la fábrica hasta su cierre definitivo en 1984, creo. Siempre que pude fui a visitar a los gallegos que vivían ahí y que trajo mi padre de Galicia para trabajar en Celtia, las familias Casado, Montero y López, especialmente esta última.
Tengo muy buena relación con el arquitecto Manuel López y su familia y con una ceramista de Magdalena y su marido, Alejandra Mariangeli, a quien conocí en Sargadelos cuando participó en las Experiencias Cerámicas. He visitado su taller hace unos años. También tengo fotos de Celtia hasta poco antes de su derribo.
– ¿Cómo fue tu experiencia estudiantil en La Plata? ¿Sigues viniendo y tienes amistades actualmente en Magdalena y en Argentina?
Como dije antes, estudié y me especialice en la Facultad de Exactas de La Plata desde donde también participe en el Centro de Estudiantes como miembro del MUR (Movimiento Universitario Reformista). En el año 72 dimos un concierto en el Aula Magna de Exactas de poesía con la poeta plantense Marta Macías, yo con la guitarra y una proyección de diapositivas que tuvo mucho éxito y repetimos en el Centro Cultural Platense.
Yo participaba con mis canciones protesta en el Almacén de San José en La Plata. En fin que participé del mundo político y universitario. Además era el que hacía los carteles para las elecciones al centro de estudiantes.
Conservo muchas amistades de la Facultad y tenemos un grupo de amigos bajo las siglas de Amigos de Plaza Matheu que ya va por la XV reunión pues viví en una casa en Plaza Matheu con otros universitarios que se convirtió en centro de debate cultural y político. Entre otros dieron conciertos en esa casa Opus4 y Domingo Cura. Forman parte de ese grupo el escritor plántense Osvaldo Pamparana, la poeta Marta Macías el escritor científico Miguel Aullman, el cantante y experto en folklore argentino Natalio Mirensky premio al mejor programa radial de folclore de Río Negro, Sorokin, Ferreira, Armando Dormetta, y otros científicos y profesores de la facultad de Exactas como Mario Aguilar.
– ¿Hay una escultura sobre Santa María Magdalena, obra de Isaac en homenaje a este pueblo?
Isaac diseño todo el servicio de mesa que se hizo en Celtia y sólo diseñó una pieza de porcelana, una María Magdalena, de la que debe haber ejemplares entre la gente de Magdalena, nosotros tenemos un solo ejemplar que va la exposición centenario de Isaac en la Ciudad de la cultura en Santiago de Compostela que se inaugura el 6 de noviembre, donde va un capítulo dedicado a Celtia y el exilio gallego en la Argentina.
Geno Díaz hizo una hermosa colección de figuras con la orquesta del Tango y los bailarines y una colección de caballos argentinos de todos los pelajes.
– ¿Qué te parece la idea de poner el nombre de Isaac a una calle de Magdalena?
Creo que poner una calle de Magdalena con el nombre de Isaac, recordar su legado allí, es hacer honor a un capítulo de la historia industrial y artística de Magdalena, de un intelectual y emprendedor muy querido en Galicia con innumerables premios, que como el mismo dice en su libro “Galicia Hoy y el resto del Mundo”: “no sé qué hacíamos un grupo de gallegos allí perdidos en el fin del mundo, lo que sí es cierto que el nombre de Magdalena me persigue en mis sueños, como si allí se desarrolló un capítulo muy importante de la recuperación de la memoria histórica de Galicia…”
Entrevista y edición: José Luis Meirás
Retrato de Camilo Díaz: Cecilia Díaz Betz
www.ceciliadiazbetz.com
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